Javier Regueros

JAVIER REGUEROS: “FELIZMENTE, MUCHAS VECES, LA IMAGEN NOS SORPRENDE. ESO ES LO BONITO DE LA FOTOGRAFÍA”
Quedamos con Javier Regueros, fotógrafo de la Dirección de Comunicación de la ONCE para hablar de la fotografía como profesión y de su experiencia en el trabajo con la discapacidad a través de un objetivo. Es un hombre sencillo, afable, de sonrisa constante, apasionado por su profesión pero que sabe disfrutar de otros aspectos de la vida como la naturaleza, el deporte o el baile y al que se le ilumina la cara al hablar de su grupo de teatro, para el que escribe y dirige obras muy personales.

 

ANTES DE TRABAJAR PARA LA ONCE TRABAJABAS PARA MEDIOS DE COMUNICACIÓN DIARA, REVISTAS, ETC. ¿CÓMO HA CAMBIADO EL TRABAJO DEL FOTÓGRAFO A LO LARGO DE ESTOS AÑOS?
Yo empecé trabajando para el diario Informaciones que pertenecía al grupo Prensa Castellana y por eso, a veces, de refilón, hacía alguna cosa para El Caso, un diario de sucesos sobre el que ahora se está emitiendo una serie en televisión. No tenía nada que ver con lo que ahora se entiende como periodismo de investigación, ¡Cualquiera se atrevía a investigar en esa época!
Por aquel entonces no existía la violencia de género, un señor mataba a su señora sin más y lo permitían la ley y las autoridades. Lo que hacíamos normalmente eran fotos para casos de asesinos en serie y ese tipo de cosas. No se investigaba nada, si había un asesinato se le endiñaba al primer desgraciado de turno y se acabó.
¿Y DESPUÉS?
Luego hubo un parón tremendo de la prensa, porque casi todos los medios de una u otra manera estaban financiados por la dictadura o por elementos cercanos a ella. Al caer la dictadura desaparecen las subvenciones y aquellos diarios nacionales, regionales, etcétera también van desapareciendo. Para los profesionales fue un momento muy duro.
Yo tuve la suerte de tener un amigo que era boxeador y que tenía bastante cabeza y montó una discoteca y me llamaba para hacer fotos cuando había fiestas. Eso me ayudó a ir tirando mientras tanto. Cerró el diario Pueblo, cerró el diario Madrid, el diario Informaciones y no había trabajo. Gracias a mi amigo pude sobrevivir. Luego empecé a colaborar en medios como La Voz de Almería o Canarias 7 y más tarde apareció la ONCE.
Purificación Santamarta 2¿CÓMO COMENZASTE A TRABAJAR EN LA ONCE?
Me llamaron para hacer un reportaje, les gustó y hasta la fecha. Empecé en la revista Perfiles y ahora estoy en la Dirección de Comunicación. En los Juegos Paralímpicos nos acredita EFE porque el pool para agencias es mejor. Prácticamente he publicado en todas las revistas nacionales y muchas internacionales y en todos los diarios españoles.
¿CÓMO HA CAMBIADO LA FOTOGRAFÍA CON LA EVOLUCIÓN DE LA TECNOLOGÍA? ¿ES UN CAMBIO REAL O SÓLO UN CAMBIO EN LOS MEDIOS TÉCNICOS?
Ha habido una evolución técnica, felizmente. Ahora el fotógrafo ve la imagen, pero no por eso deja de sorprendernos, que es lo bonito de la fotografía. Antes la espera era cuestión de un día, de revelarla tú mismo si la hacías en blanco y negro o de llevarla al laboratorio si era a color y en ese momento era cuando nos sorprendía esa imagen especial que a todos nos impresiona. Ahora mismo es prácticamente inmediato pero, aun así, hay momentos en los que dices: ¡La madre de Dios! La he visto, pero no te haces a la idea en el mismo instante.
Tienes que estar ahí, ser capaz de ralentizar esa imagen, de medir esa luz, de elegir la luz que más te gusta, porque la luz no es única y varía muchísimo y la fotografía se trata de jugar con ella, más allá de la creatividad técnica. Pero ese momento, ese mágico momento, nunca dejará de sorprendernos, aunque hablemos ya de fotografía instantánea nos sigue sorprendiendo.
¿Y HA CAMBIADO LA LABOR DEL FOTÓGRAFO?
Ha cambiado. Yo me acuerdo de una época en la que para sobrevivir revelaba fotos de otra gente. Tenía un pequeño laboratorio en blanco y negro y otro en color y me dedicaba a hacer revelados. Había un chaval que me traía fotos con una creatividad impresionante. Yo veía que no debía tener una gran cámara por las ópticas que utilizaba, pero su creatividad era brutal. Un día, hablando con él, me dijo que su cámara sólo tenía dos diafragmas y una única velocidad. Pero la fotografía estaba en su cabeza, me di cuenta de que él la veía perfectamente en su cabeza. Hay un cajón con una emulsión o un sensor dónde vamos a registrar una imagen, pero si esa imagen no está en tu cabeza, clara y definida, vas a hacer cualquier cosa.
Por otro lado, recuerdo una vez que salí a hacer fotos al campo con un señor cuya familia tenía mucho dinero y llevaba una Hasselblad, una Nikon y cuarenta mil cosas más, pero todo lo que hacía era disparar al paisaje, sin ser capaz de crear planos ni ver nada especial. La fotografía está en la cabeza del fotógrafo.
Y EL TRABAJO DEL FOTÓGRAFO DE PRENSA, ¿CÓMO SE HA TRANSFORMADO?
Hemos pasado también en prensa a la transmisión inmediata. Antes Alguersuari mandaba a la Agencia EFE una paloma mensajera con un negativo atado a la pata desde la Vuelta a España. Yo lo noto cada vez que vamos a los Juegos Paralímpicos. Actualmente cuando haces la fotografía la cámara la manda por wifi al IPad que llevas contigo, la retocas y la mandas en el momento. Hay que medir y conocer la luz, anticiparte, conocer a la persona y ser un poco psicólogo para saber lo que va a hacer, prever un movimiento porque lo has visto muchas veces… felizmente muchas veces la imagen nos sorprende. Eso es lo bonito de la fotografía.
Además, nos sorprende de dos maneras: primero conscientemente; y luego desde una parte desde la que conscientemente no acabamos de verla y tardamos un tiempo en saber lo que hemos hecho. Ahora hablamos mucho de El Quijote, pero seguro que hay muchas facetas de lo que escribió que Cervantes no vio en el momento. Hay muchas facetas de la imagen que vamos a ir descubriendo con el tiempo, por mucho que las veamos en el momento.
Sáhara 1 2COMO TRABAJAS MÁS SEGURO, ¿AHORA CON DIGITAL O ANTES CON ANALÓGICO? SIGUES PLANTEÁNDOTE LA ETERNA PREGUNTA: ¿LA TENGO O NO LA TENGO?
Yo creo que es algo más seguro el trabajo con digital, hay que reconocerlo. No es que haya mucha diferencia, porque tienes que tener bien medida la luz, tener preparado el foco y conocer bien la velocidad de toma (no es lo mismo manejar 1/125 de velocidad según para qué, que 1/250 según para qué)
La diferencia en profesionales con experiencia en disciplinas como la fotografía de deportes, radica en que si antes podías decir: ¡La tengo! con un noventa por ciento de probabilidad, ahora puedes decir que la tienes a un noventa y cinco por ciento. Se ha mejorado en un pequeño margen, pero no por ser digital está todo hecho.
Lo primero es que tienes que haber hecho un buen foco, porque en el deporte la acción va muy rápido y a veces piensas que lo tienes pero luego no tienes un foco crítico. Por ejemplo, en lanzamiento de disco, el sujeto se está moviendo muy deprisa, con un doble movimiento de desplazamiento y giros y tienes que saber muy bien qué velocidad tienes que manejar y dónde tienes que disparar. Ahora aseguras más, pero no tanto como podemos pensar. Ha habido buenas fotos y grandes fotógrafos de deportes en fotografía analógica.
¿TE PERMITE ESA PEQUEÑA SEGURIDAD EXTRA CENTRARTE MÁS EN LA IMAGEN Y MENOS EN EL FOCO?
Sí. Yo a veces doy algún curso sobre atletismo y siempre les recomiendo que cuando están empezando trabajen a disparo, sin usar los motores. Luego ya pueden disparar a 18 fotogramas por segundo, pero primero es mejor acostumbrarse a coger esa imagen. Es cierto que puede ayudarte a centrarte un poco más en la imagen, pero en profesionales es una diferencia sólo de un cinco por ciento.
CUANDO SE TRABAJABA EN ANALÓGICO, POR EJEMPLO EN LOS JUEGOS DE BARCELONA 92, HABÍA UN SERVICIO DE RECOGIDA DE CARRETES A LOS FOTÓGRAFOS. ¿HAY ALGO SIMILAR EN DIGITAL O SOIS VOSOTROS MISMOS LOS QUE HACÉIS EL TRABAJO DE EDICIÓN?
No, ya no. Ahora directamente vas con tu portátil o tu Tablet y ya no es necesario. Creo recordar que en Pekín todavía funcionó un servicio de recogida de tarjetas. En Londres funcionábamos más por cable, a pesar de que en Pekín funcionamos por wifi de maravilla.
¿CÓMO FUNCIONA EL TRABAJO DE EDICIÓN? ¿ENVÍAS LOS BRUTOS A EFE Y ELLOS EDITAN O LO HACES TÚ MISMO?
Normalmente haces una pequeña edición porque todo va muy rápido: tiras tus fotos, seleccionas en el momento, haces una pequeña edición y las envías. Luego tenemos un editor central que recibe las fotos de todos los fotógrafos y las edita ya con más cuidado. Luego pasa por un redactor que une texto y foto y lo envía a EFE, Servimedia y el resto de agencias de España. Todo éste proceso puede llevar tan sólo tres o cuatro minutos.
¿QUÉ CRITERIO SE IMPONE A LA HORA DE ELEGIR UNA FOTO, EL DEL FOTÓGRAFO O EL DEL EDITOR?
La foto la elige el fotógrafo. De hecho, yo sólo envío la foto que considero que es la buena. Si todos los fotógrafos enviáramos todas las fotos provocaríamos una saturación del sistema de trabajo.
EN LA ETAPA DE TRANSICIÓN AL AUTOFOCO ERA COMÚN VER A LOS PROFESIONALES CON SU CÁMARA MODERNA CON ENFOQUE AUTOMÁTICO Y LA ANTIGUA CON FOCO MANUAL POR SI FALLABA. ¿CÓMO FUE LA TRANSICIÓN DEL ANALÓGICO AL DIGITAL? ¿SE TRABAJABA CON LAS DOS A LA VEZ O DIRÉCTAMENTE EN DIGITAL?
No, no, no. Yo fui de los que llevaban las dos (se ríe) Lo del autofoco no acababa de estar desarrollado. Funcionaban, pero eran lentos y en un trabajo así necesitabas rapidez en el foco.
Luego con el digital tuve la suerte de probar las primeras Nikon D1 en los Campeonatos del Mundo de Atletismo de Sevilla. Era el campeonato de personas sin discapacidad, pero había algunas pruebas para personas ciegas y nos dejaron probar las cámaras digitales. Eran un desastre, se bloqueaban, no enfocaban y les decíamos: ¿Dónde vais con esto? A lo mejor para alguien que quiera fotografiar una flor, vale, pero para deporte no. Cuando disparabas cuatro o cinco fotos ya estaba bloqueada esperando a guardarlas en la memoria. Tenían muy poquita resolución, algo más de un mega, y las tarjetas eran de 128 megas, pero ciento y pico fotos eran más que treinta y seis, lo cual ya te parecía mejor que el carrete.
Los sensores eran muy buenos, el tema del color también estaba bien resuelto, pero la resolución era muy poca comparada con los 60 megas que da ahora una cámara por imagen. La resolución actual es la que te daría un formato medio escaneado en un escáner de tambor.
Teresa Perales 14 2¿HAS TRABAJADO ALGUNA VEZ EN GRAN FORMATO?
Sí, he hecho alguna cosa en 9x12. También he hecho trabajos en fotografía de arquitectura. Era un trabajo para fotografiar unos edificios y necesitábamos un formato grande porque había que mover mucho la placa para que no se distorsionaran las líneas y fueran paralelas.
HAS TRABAJADO CON EQUIPOS DE LAS DOS GRANDES MARCAS: CANON Y NIKON. ¿CON CUÁL TE QUEDAS: CANONISTA O NIKONISTA?
Son diferentes y ellos mismos se han dado cuenta de que tenían que apostar cada uno por una dirección porque no podían competir.
Yo, si quiero hacer fotografía social, retrato, etcétera, me voy a Canon. A mi modo de ver, tiene muchas más gamas tonales. Refleja muy bien todos los matices de la luz en las caras, las zonas de luz, las zonas de sombra.
Pero si vamos a hacer fotografía de deportes, teatro, ocio, etcétera, Nikon tiene más sensibilidad, puedo tirar a 6.400 ISO sin ruido y, además, la imagen va más saturada, lo que hace que la foto deportiva sea más vistosa. Luego con el RAW puedes saturarla o no según como te guste. Si voy a un campo de fútbol y tengo que tirar a 1/250 de velocidad y un diafragma de 8, puedo poner 6.400 o 12.800 ISO y no tengo ruido, y Nikon se ha especializado en eso. En teatro, por ejemplo, las luces son muy bajas y también suelo llevar Nikon. En cambio, si tengo que hacer unos saludos de ministros o de la Casa Real, llevo Canon para asegurar. Con Canon en días soleados en las zonas con mucha luz mantienes la información, no se nos quema, sin embargo, con Nikon esas zonas se nos pueden quemar. Y cuando quemas una foto, es insalvable, aunque hay algún truco que otro día contaré. Nikon tiende a quemar más la imagen.
¿EN QÚE SE DIFERENCIAN SUS ÓPTICAS?
Con las ópticas pasa lo mismo. Si yo tengo que hacer fotos de unos saludos y tengo que ser muy rápido y enfocar foto a foto, trabajo más rápido con una óptica de Canon. Pero si tengo que hacer un seguimiento del sujeto enfocado en fotografía deportiva, una óptica de Nikon en seguimiento es más rápida.
Cuando estás trabajando no puedes fallar una fotografía. Yo no me puedo permitir el lujo de fallar una foto en un campo por la noche con iluminación artificial y en la que tengo que hacer un balance. Tampoco puedo fallar una foto de un saludo del Rey Felipe, así que yo sé que con Canon no lo voy a fallar, mientras que Nikon es un poco más lento. Pero en el partido por la noche me va a dar más ruido que Nikon, que tiene el sensor preparado para sensibilidades altas. Una Nikon se puede poner a 200 ISO, pero está preparada para trabajar a 800 ó 1.600. Sin embargo Canon da más grano porque su sensor está preparado para trabajar a 200 ó 400 ISO.
¿QUÉ ÓPTICAS DAN MÁS CALIDAD?
Son muy buenas las dos, ahí si que ya no sabría qué decir. Igual que los teleobjetivos de Nikon son muy, muy buenos, en las ópticas cortas quizá sea un poco mejor Canon. Pero son muy, muy buenos los dos.
CUANDO APARECIERON LOS OBJETIVOS ZOOM, EN LOS AÑOS 70 DEL SIGLO PASADO, SE DECÍA QUE ERAN MUCHO MEJORES LAS ÓPTICAS FIJAS. AHORA HAN EVOLUCIONADO MUCHO, PERO ¿SE PUEDE SEGUIR DICIENDO QUE LA ÓPTICA FIJA DA MUCHA MÁS CALIDAD?
Sí, claro que sí. Los zoom son mucho mejores que los primeros que tenían unas aberraciones cromáticas brutales, han evolucionado mucho y ahora son muy buenos, pero una óptica fija tiene mucha más calidad, desde el punto de vista cromático, de distorsiones y en todos los aspectos. No puedes comparar un 16-50mm con un 16mm fijo; ni un 50 mm zoom con un 50mm fijo. Yo tengo un 50mm de Leica y todavía no he visto nada mejor que eso.
¿QUÉ OPINAS DEL BOOM DE LA FOTOGRAFÍA Y EL VÍDEO CON DISPOSITIVOS MÓVILES?
La gente no entiende que las fotos hechas con el móvil son malas, muy malas. ¿Cómo va a hacer una foto buena un dispositivo con una óptica y un sensor diminutos? En condiciones muy buenas de luz y para verlas en pantalla pueden valer, pero es imposible ampliar porque no tiene foco. No hay gamas tonales ni foco en ninguna parte.
DICEN QUE LA FOTOGRAFÍA SE DISFRUTA MÁS DE AFICIONADO, ¿SIGUES HACIENDO FOTOS EN TU TIEMPO LIBRE?
No, porque vivo de esto. Cuando vives de esto llega un momento en el que cuando sales por ahí no haces fotos. He llegado a tener un oso cerca en Asturias y no he pensado “Qué pena no tener la cámara”, sino que me he dedicado a verlo y disfrutarlo.
TIENES TAMBIÉN UNA FACETA DE AUTOR TEATRAL
Sí, lo que más me gusta escribir es teatro. Ahora se está representando en Francia una obra mía que se titula Más allá. Trata sobre un depósito de cadáveres en el que van entrando fallecidos que van contando su historia, hasta que descubrimos que todos estaban relacionados de alguna manera. Tiene un final de ultratumba muy bonito (se ríe)
Y DIRIGES UN GRUPO DE TEATRO…
Sí. El nuestro es un teatro de diversión. Yo les escribía obras a medida hasta que el director lo dejó y me propuso que lo sustituyera, pero yo le dije que no, porque en ese momento ni tenía tiempo ni sabía dirigir. Pero cerca de donde yo trabajaba entonces había una escuela de teatro y empecé a formarme hasta que me animé a dirigirles. Ahora estamos haciendo una obra sobre desahucios.
Una de nuestras últimas actuaciones fue un entremés para la función de Navidad del Ayuntamiento de Alcorcón. Era la representación de una cena en familia, con los cuñados hablando de fútbol; las cuñadas comentando el poco gusto de la decoración; los sobrinos pegándose; y los abuelos intentando llegar a la cabecera de la mesa. Luego empieza la cena y sólo comen una aceituna y una miga de pan, pero están todos contentos comentando lo bien que han comido y sólo tienen una uva para la última campanada y una botella pequeña de casera para brindar. Al final se marchan todos muy contentos y sale un enfermero con una bata blanca y comenta que todos los años tiene que dejarles el salón del manicomio para hacer esa “mojiganga”. Al público le gustó mucho, a pesar de ser poco tradicional. A la gente le gusta que les rompamos los esquemas diciéndoles que estamos todos locos.